Empacar en una maleta para viaje puede ser relativamente fácil si se planea por adelantado y se tienen en cuenta todas las características del viaje que se va a hacer.
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No espere hasta la noche anterior al viaje para empezar a empacar, es importante tener tiempo para programar lo que va a necesitar y para acomodar todo de manera eficiente.
Inicialmente hay que averiguar acerca del clima al que vamos a ir, para poder empacar de acuerdo con las necesidades que se van a presentar, sean lluvia, calor o temperaturas extremas.
Si es posible, hay que planear cada día de viaje, así se podrá prever cuantas mudas de ropa se usarán por cada jornada. También para empacar precisamente lo que se va a necesitar y no llevar cosas de más, que terminan ocupando espacio valioso en las maletas. Siempre será más difícil manejar una maleta cuando se empacan cosas de más que cuando hace falta algo, porque si hacen falta cosas sencillas (como una bermuda, unos calcetines, etc) se pueden comprar en el destino.
Algunas personas encuentran muy útil hacer una lista de todo aquello que vaya a ser necesario durante el viaje. Con una lista se organiza todo mejor antes de iniciar el empacado.
Su viaje será de negocios o de turismo? Esto es valioso para decidir que tipo y tamaño de maletas va a usar. Un viaje de negocios de 3 días solo requerirá una maleta mediana, mientras que un viaje familiar de una semana necesitará una maleta grande con ruedas para facilidad de transporte.
Haga un pre-empaque y ponga todo lo seleccionado para llevar, afuera al lado de la maleta para decidir lo que realmente va a ir con usted. Enfóquese en llevar colores neutros como el negro, los grises y los estampados sencillos. Mientras más uniforme sea la elección de la ropa, más fácil será hacer combinaciones a la hora de vestirse, además de que podrá empacar mucha menos ropa.
Haga cuentas y empaque una muda de ropa interior, calcetines y camisilla para cada día del viaje.
Usar la misma muda el día del viaje de ida y el día del regreso, es una buena opción para evitar un día de ropa en la maleta.
A pesar de que en los hoteles es normal encontrar los artículos de aseo, es buena idea que consiga algunos adminículos como: Cepillo de dientes y crema dental, bolsas pequeñas autosellables (para las joyas, botellitas de champú, acondicionador, cremas para la cara y el cuerpo), bolsa grande autosellable para empacar botellas y cremas que se puedan derramar. Empaque estos elementos en un bolsillo exterior al final para que no sufran con el peso de otras cosas encima de ellos y para acceso fácil a la hora de pasar por la zona de seguridad en los aeropuertos.
Al empezar a empacar hay que meter la ropa grande y pesada al fondo, de primera. También los zapatos deben ir al principio y en lo posible use los espacios al interior del calzado para empacar calcetines y cosas pequeñas. No solo ahorrará espacio, sino que ayudará a que los zapatos no se deformen con el peso y el manejo. Los zapatos deben ser empacados dentro de bolsas plásticas.
Póngase los zapatos más grandes y pesados para el viaje y empaque los livianos. Esto debe hacerse también con la ropa, use la más grande y pesada para los viajes y deje la más liviana en la maleta.
Después de empacar los zapatos, ponga una capa de ropa pesada como jeans, sacos de lana, abrigos.
Hay dos formas de preparar cada prenda antes de empacar: Doblar o enrrollar.
Si lo que le preocupa es que tiene poco espacio, lo mejor es enrrollar, puesto que esto toma mucho menos espacio que la ropa doblada. Si no tiene problemas de espacio es preferible llevar la ropa doblada. Puede de todas formas, usar los dos métodos a la hora de preparar sus cosas.
Si va a enrrollar hágalo de la manera más apretada posible, para que logre ahorrar espacio y para que la ropa no se arrugue con el movimiento. Al enrrollar no se va a arrugar la ropa siempre y cuando enrrolle evitando que se formen arrugas.
La ropa que se empaque enrrollada debe ser acomodada de manera muy apretada, ya que si queda muy suelta es probable que se desenrrolle y se arrugue. Use camisillas enrrolladas para separar secciones dentro de la maleta.
Organice su ropa en grupos: Camisillas en uno, camisetas en otro, camisas en otro, pantalones en otro, etc. y enrolle cada grupo, así ahorra aún más espacio y evita la posibilidad de arrugas. Meta cada grupo en la maleta por separado.
La siguiente capa debe ser de cosas livianas enrrolladas, como camisetas y ropa interior. Encima de esta capa puede poner la ropa doblada, así tendrá acceso para arreglarla en caso de que se arrugue y podrá sacarla y colgarla casi de inmediato.
Empaque las cosas delicadas al centro de la maleta. Estando en el medio de todo, los golpes y caídas sean amortiguadas por la ropa alrededor.
Las camisas de traje y la ropa formal son la capa siguiente, así puede quedar en una superficie plana y también para que sea más rápido sacarla para colgarla, plancharla o mandarla a la lavandería.
La ropa interior sobrante, cinturones, corbatas o calcetines son ideales para rellenar espacios que queden vacíos a los lados de la maleta.
Al final, puede poner las bolsas con medicamentos, artículos de aseo, joyas y adminículos de uso personal. No olvide dejar espacio para los regalos del regreso!
Listo, ahora solo cierre la maleta y disfrute el viaje.
Para el viaje de regreso lo mejor es conseguir una de esas bolsas con compresor para que meta toda su ropa en ella, saque todo el aire y quede bien compacta y pequeña.
Recuerde que todos los documentos importantes, identificaciones, billetera, dinero y documentos del viaje deben estar en su maleta que lleva con usted en cabina.
Lleve en esta maleta un kit de emergencia, en caso de que se pierda su maleta grande en el aeropuerto o se demoren en la entrega, así tendrá a mano lo que pueda necesitar.